Hoy es un día malo, mucho. Me he decidido a escribir a pesar del dolor porque quizás así sea capaz de describir mejor lo que me ocurre.
Como ya sabéis estoy en racha positiva. Hoy se truncó esa racha… y a lo bestia. Tengo tanto dolor que mi mente no está clara y ando como drogada. Es más de medio día y me he levantado sólo para ir a la piscina. Vengo de allí y no sé ni cómo he sido capaz de hacerlo. He ido sin fuerzas, sin poder andar, arrastrando mi cuerpo… Luego en el agua, con lo mucho que me gusta y lo bien que me siento, y también fue mal. Me duché entre sollozos y por fin estoy de vuelta a casa. No puedo decir que me sienta bien pero sí estoy un 5% mejor que antes y eso para mí, ya es avanzar.
Os cuento todo esto para desahogarme, para deciros que ya me creía una persona normal, que incluso hacía planes a largo plazo y de nuevo hoy vino a visitarme el monstruo de la fibro. Eso sí, no pienso dejarlo que se acomode en mi cuerpo como le gusta hacerlo. Hoy ya di el primer paso para echarlo de mí.
No puedo seguir, me voy a descansar pero os necesitaba para desahogar mi frustración y mi rabia. Decirle a Iratxe que hoy se ha librado pero le espera en breve un día exhaustivo de compras en mi compañía. Gracias niña por ser tan compresiva siempre. A los nuevos que me habéis empezado a leer agradeceros vuestras palabras, a Maribel decirle que ya me comentó mi hermana que estuvisteis hablando y en cuanto esté un poquito más animada me pongo en contacto contigo, gracias por el mensaje. Y por supuesto a los de siempre, que os noto y eso me hace más fuerte.
Prometo volver pronto con mejores noticias. Lo deseo con todas mis fuerzas.