lunes, 28 de marzo de 2011

Sonrisas y buenos tiempos

Hola compañeros de fatigas. Escribo para contaros buenas noticias. Después de muchas semanas y varios post fatídicos por fin estamos en tiempos mejores. Ya tenía ganas de pasar una racha así y estoy segura que todos vosotros de leerlo.

Pensé que si el propósito de este blog es explicar cómo vivo mi enfermedad para qué iba a escribir si me siento con fuerzas, sonriente, tranquila y con dolores que se pasan al tomar un simple ibuprofeno. Pero luego me he planteado que esto también forma parte de mi día a día y además os lo debo a todos aquellos que cuando leéis mis días horrorosos se os encoge un poquito el corazón y también a aquellos que sois como yo, que estáis sufriendo y pasando por lo mismo.

A los primeros quiero agradeceros vuestro apoyo y solidaridad. A los segundos deciros que ánimo, que esto no se cura (de momento) pero sí da treguas y que con un poquito de sacrificio y escuchándoos mejor a vosotros mismos podéis ver que os viene mejor, hacerlo y así conseguir alivio. Porque como bien sabéis para nosotros un minuto de alivio significa un minuto de vida, un vermut en la terraza del infierno, un respiro por deshacernos de esa losa, un minuto significa vivir en la realidad volviendo del mundo de los zombis.

Espero que la próxima vez que nos veamos por aquí pueda contaros que sigo bien y recuperando actividades que dejé aparcadas tantos meses. Pero si no es así, me propongo releer este escrito para ver que no tengo que desesperar, que volveré a tener días de alivio y paz.

Ahora soy consciente que entre dolor y dolor puedo tener días buenos. Mi nuevo propósito es conseguir que siempre mis días sean buenos y a penas dejarle al dolor margen de maniobra. Cosas más raras se han visto.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Esperando el verano

Hola a todos,

No he escrito antes pero tampoco hay demasiadas novedades. Estoy pasando una mala época, que coincide con la misma del año pasado. Los peores meses fueron de enero a junio más o menos y este año está siendo idéntico. Bueno, si me apuráis igual es un poco menos malo ya que al ser más "experta" en mi enfermedad me lo tomo de otro modo al igual que lo combato con cosas que me hagan sentir aunque sea un 5% mejor.

Me paso el tiempo arrastrándome de un lado a otro hasta que no puedo más y caigo exhausta en la cama. En ocasiones aguanto el día, otras sólo medio y otras veces he de tumbarme a penas dos o tres horas después de haberme levantado. Así que lo tomo como viene y procuro no desesperarme mucho.

La parte más positiva es que es dolor horroroso no se está instalando más de 24 horas seguidas en mi. Eso sí, prácticamente lo tengo día sí día no, aunque al menos me da intervalos de descanso por muy pequeños que estos sean. Creo que se debe a la piscina y por eso no la dejo por nada del mundo. A veces casi no tengo fuerzas ni para subir y bajar del autobús pero igual voy a nadar. En el agua me siento LIBRE. Es una sensación extraña y placentera por eso me esfuerzo lo necesario para ir sea como sea. Ahora estoy preocupada porque sigo con la cadera mal y lo que más necesito para recuperarme es reposo pero me angustia pensar en no ir a la pisci. Tengo que buscar una solución. Igual en lugar de tres días a la semana voy dos o me quedo una semanita en casa a ver si se me alivia. No sé, ya veré.

Por último contaros que desde hace poco estoy yendo a una psicóloga. Necesito que me ayude a vivir con esta puta enfermedad y sobre todo, necesito saber manejar este tema para que no les afecte tanto a los que conviven conmigo día a día. Sé que tengo que vivir con esto y mi familia y amigos también pero que me enseñen a vivir con ello y no para ello.

Estoy pasando unos días muy malos pero sé que vendrán mejores.